El 1 de febrero de 2024, Rina Valle Juárez y su esposo conducían por la carretera hacia el municipio de San Pedro de Colalao, provincia de Tucumán, Argentina, cuando la mujer decidió tomar algunas fotos del entorno.
Mientras tomaba fotos desde la ventana del auto en movimiento, Rina notó una extraña mancha oscura en el cielo, pensando inicialmente que era un pájaro, específicamente un mirlo negro.
Pero al comenzar a fotografiar intencionalmente este objeto, concluyó que no era un pájaro sino más bien un «platillo volador».
Según Rina, el OVNI fue visible en el cielo durante unos tres minutos, y luego desapareció en algún lugar.
En ese momento, la mujer no prestó mucha atención a lo que sucedía, pero más tarde, al examinar las fotos que había tomado, se dio cuenta de que había capturado el «platillo volador» con bastante claridad y detalle.
Al hacer zoom, incluso es posible ver que la superficie del OVNI no es lisa sino que tiene algunas líneas.
En una entrevista con periodistas, Rina dice estar segura de haber capturado una «nave», aunque no la llama directamente una nave espacial alienígena.
También señala que cuando tomó la última foto del OVNI, notó tres puntos negros más en el cielo, uno de los cuales era cuadrado y dos eran redondos.
Los medios argentinos informan que el área de San Pedro de Colalao ha sido conocida durante mucho tiempo por avistamientos frecuentes de OVNIs.