Scholomance (también conocida como Scholomans o Scolomans) es una misteriosa escuela de magia negra ubicada en cuevas subterráneas en algún lugar de las montañas de Rumania, lo más lejos posible de la luz y de las personas.
El nombre más conocido asociado con este lugar es el legendario Vlad Tepes – Drácula. Se sabe con certeza que el escritor Bram Stoker, antes de componer su «Drácula», estudió cuidadosamente todos los mitos y leyendas rumanas sobre vampiros, incluida la historia de Scholomance.
Se rumorea que Drácula estudió las artes oscuras en esta escuela mágica y se decía que era un poderoso hechicero. La mayoría de estos rumores surgieron después de su muerte, pero es un hecho.
Según el folclore, esta escuela de brujos era dirigida por el Diablo mismo y solo se seleccionaban para el estudio en la escuela a los 10 estudiantes más fuertes y devotos al Diablo, buscados en todo el mundo. Se les enseñaban los secretos de la naturaleza, los conjuros mágicos y el «lenguaje de los animales», así como la habilidad de tener dominio sobre los animales más bajos y controlar las mentes de los animales y personas débiles.
Al finalizar sus estudios, nueve estudiantes regresaban a su tierra natal, y el décimo se convertía en el Señor del Clima con la capacidad de crear todo tipo de fenómenos climáticos y controlar el clima en general. Se convertía en un proscrito para siempre, pero se le asignaba un dragón personal con el que volaba por el cielo.
Este dragón, llamado Balaur (o Zmeu), se mantenía en un lago de alta montaña cerca de la escuela, y no se le hacía volar sin necesidad.
Scholomance no solo estaba cuidadosamente oculta bajo tierra para evitar miradas indiscretas, sino que también estaba encubierta con hechizos, de modo que para el ojo humano común, incluso si estuviera cerca de sus puertas, sería completamente inaccesible.
A los estudiantes se les prohibía salir a la luz del sol y en general tener contacto con el mundo exterior durante todo el curso de estudios. A menudo, entre ellos había niños, ya que se creía que la educación debía comenzar desde temprana edad.
Al examinar detenidamente todas las leyendas sobre Scholomance, queda claro que no es simplemente una escuela del Diablo, sino más bien una enseñanza similar al misticismo medieval. También es posible que la base de las leyendas sobre Scholomance fuera un refugio secreto real para brujas y hechiceros que huían de las hogueras de la Inquisición y querían transmitir sus conocimientos a las nuevas generaciones.
Otra teoría sugiere que la escuela estaba relacionada con el gran rey Salomón (de ahí su nombre), quien tenía el don de controlar demonios del Infierno. En una ocasión, incluso obligó a los demonios a construir un templo en Jerusalén. Para ello, tomó bajo control mental al demonio más fuerte y luego comenzó a controlar a los demás a través de él.
Y, en consecuencia, la magia enseñada en Scholomance era esa misma magia judía con la que los judíos, entre otras cosas, creaban sus Golems. Esta magia es más conocida como Cabalá.
