El Impacto de Factores Externos en el Sueño Lúcido
En un caso, la persona experimentó parálisis del sueño, acompañada de una vívida sensación de una presencia externa, como si estuviera directamente en su mente. Esta presencia fue percibida como una entidad oscura y demoníaca, que emitía un fuerte sonido de siseo y parecía intentar consumir su conciencia. Parecía que la entidad y el miedo asociado eran los factores paralizantes. Al intentar gritar, la persona se despertó.
Un tiempo después, ocurrió un despertar similar, aunque sin la entidad, pero con el sonido de siseo aún presente. Debido al despertar abrupto, se identificó que el sonido provenía de un auto defectuoso afuera de la ventana, que solía estar en movimiento durante la noche. Despertares angustiantes similares, provocados por ruidos repentinos en el mundo real, se repitieron posteriormente.
Hallazgos de la Investigación sobre el Sueño Lúcido
En general, es difícil determinar qué facilita o dificulta la entrada a tales estados y las diferentes experiencias que se viven. La salud y la actividad física parecen influir en la calidad de la entrada. Ninguna de estas experiencias proporcionó nuevos conocimientos sobre el futuro ni detalles del mundo real desconocidos anteriormente, con una posible excepción. En un sueño lúcido fortuito, el soñador vio una habitación vacía mientras se preguntaba si habían movido los muebles, lo cual coincidió con la realidad.
Estas experiencias sugieren que mantener este estado requiere energía, resultando en sesiones más largas pero menos vívidas o sesiones más cortas y más intensas. Los estados más lúcidos logrados se sintieron más intensos que la vigilia común, similares a estados inducidos por situaciones extremas o euforia.
Percepción de la Telepatía
Durante estos experimentos, surgió un problema recurrente: al alcanzar una conciencia elevada, las perturbaciones auditivas sistemáticas, como ruidos de otras personas en la casa, causaban despertares inevitables. Un caso concluyente involucró a la esposa del autor, cuyas reacciones físicas o vocales coincidían con la intensificación de la conciencia del autor. Sorprendentemente, ningún estímulo físico tangible provocaba tales reacciones, pero ella respondía consistentemente cuando el «ruido interno» del autor aumentaba. Esto no era provocado por factores externos, ya que los ruidos reales no producían el mismo efecto.
Hasta el día de hoy, la esposa ocasionalmente reacciona a la actividad mental del autor, lo cual en ocasiones lo ha llevado a dejar de pensar por completo. En una ocasión, el autor recibió una respuesta en forma de un «no» y un «sí» pronunciados por su esposa en sueños, aunque esto parecía más una respuesta emocional que una contestación específica.
Esta sensibilidad a la actividad mental del autor también se observó en otras personas, incluso en habitaciones diferentes, descartando señales físicas como el cambio en el ritmo cardíaco. Sin embargo, solo ciertas personas reaccionaban, y no siempre de forma predecible; algunos días la respuesta era continua y en otros estaba ausente. No obstante, esta respuesta era consistentemente observable, cesando con la quietud mental del autor y reapareciendo al reanudar su proceso de pensamiento.
En una ocasión, el autor experimentó una fuerte angustia emocional en una situación extrema. En ese momento, su esposa, que normalmente llamaba en otro horario, lo contactó inesperadamente para verificar si estaba bien. Sin embargo, los intentos de transmitir información específica o ubicación mediante medios extrasensoriales no tuvieron éxito.
Parece claro que la intensidad emocional, en lugar de pensamientos lógicos, es lo que desencadena estas reacciones. Tales reacciones típicamente ocurrieron durante reflexiones emocionalmente significativas o importantes a nivel existencial, lo que sugiere que las emociones, y no la información estructurada, podrían percibirse a través de canales extrasensoriales. La investigación sobre habilidades extrasensoriales debería enfocarse en detectar la transmisión de emociones.
Sueños Lúcidos y Experiencias Fuera del Cuerpo Usando Sustancias Psicoactivas
Se realizaron experimentos con plantas como Datura y Atropa belladonna, consumidas con extrema precaución debido a sus efectos potencialmente letales. La Datura dio resultados negativos, provocando una mezcla de realidad y sueños que se sintió mundana. El soñador parecía «despertar» repetidamente en el mismo lugar tras realizar diversas tareas, creando un bucle.
La belladona dio un resultado más favorable, aunque con efectos secundarios significativos. Consumida en pequeñas dosis monitoreadas, llevó a un estado de excitación pero con claridad mental. Al quedarse dormido, el estado de conciencia se alcanzó fácilmente, pero fue acompañado de intensos efectos auditivos y visuales que interrumpieron el sueño. Estos efectos incluían voces, distorsiones surrealistas del techo y transformaciones de objetos, creando una sensación abrumadora de locura. En consecuencia, el autor tuvo que mantenerse despierto hasta que los efectos desaparecieron. Al día siguiente, persistieron efectos leves, incluyendo la visión clara de un cielo estrellado a través del techo cerrado, a pesar de que el cielo estaba nublado en la realidad.
Estos experimentos concluyeron que el control de sueños lúcidos es mejor sin el uso de sustancias psicoactivas, aunque la belladona proporcionó efectos destacables. No se obtuvo información nueva, excepto por un peculiar mensaje en letras rojas bajo el efecto de la Datura, que luego coincidió con una nota en letras rojas que el autor notó al despertar.
Sueños y Asociaciones Simbólicas para Predecir el Futuro
Con el inicio de estos experimentos, surgieron sueños recurrentes en los que el autor ascendía en varios edificios. En ese momento, su trabajo estaba relacionado con la construcción, y más tarde experimentó sueños donde los edificios se elevaban en espiral hacia el cielo antes de aparecer como dibujos, reflejando su renovado interés en el dibujo. Pronto, el arte se convirtió en su ocupación principal.
Otro sueño recurrente involucraba el viaje en metro, simbolizando su rutina laboral monótona y los viajes infrecuentes en metro. Al finalizar este trabajo, los sueños sobre el metro cesaron, pero un sueño sobre una moto precedió a una mejor oportunidad laboral. Esto llevó al autor a hipotetizar que los medios de transporte en sueños podrían simbolizar el estatus material, el estatus social y la rapidez en el progreso económico, siendo la propiedad de un automóvil un punto de orgullo personal.
Los sueños de ascender en edificios paralelaban la adquisición de conocimientos, el desarrollo de habilidades y la expansión de la perspectiva. El autor asoció los edificios con jerarquías sociales, dado que los apartamentos de lujo suelen ocupar los pisos superiores. Estos sueños coincidieron con su transición hacia el arte, un campo que requiere mayores cualificaciones que el trabajo de construcción. Por otro lado, los sueños de descenso o caída simbolizaban la regresión o el deterioro moral, y algunos períodos problemáticos de su vida fueron precedidos por tales sueños. El movimiento horizontal en los sueños representaba el éxito material, mientras que el movimiento vertical simbolizaba el crecimiento intangible.